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La aparición de la tercera parte de las películas Antes
(Antes de amanecer y Antes del atardecer) podía suponer, en principio, algún
problema. El primero era como darle continuidad a un final tan ambiguo y
perfecto como el que tenía Antes del atardecer. El segundo era la dificultad de
volver a mostrar la creación del amor a través de las palabras que dicen sin
parar Jesse (Ethan Hawke) y Celine (Julie Delpy). La solución final fue no
mostrar la creación del amor sino su consolidación convirtiendo a Jesse y
Celine en una pareja estable con responsabilidades como hijos y trabajo. Los fans de la trilogía no deben temer ya
que en Antes del anochecer el trio que forman Richard Linklater, Ethan Hawke y
Julie Delpy no se salen del esquema conocido que son las largas conversaciones
sobre el amor o la diferencia entre hombres y mujeres que forman el armazón de
las películas. Esta vez situados en una isla griega, que se transformará en una
perfecta metáfora de la relación entre Hawke y Delpy, Antes del anochecer los rodea
en su primera parte de varias parejas donde veremos distintas formas de
“sobrellevar” el amor. Anteriormente
veíamos el romanticismo desde el punto de vista de una (joven) pareja y
ahora lo vemos desde la visión de unas parejas de distintas generaciones
enamoradas pero con los pies en la tierra sobre la idealización de una pareja
ideal. Un aviso de lo que va a ser el meollo de Antes del anochecer.
En la segunda parte del film Richard Linklater vuelve a
desnudar el escenario. Ya no hay niños ni personajes secundarios ni nadie con
quien interactuar y Ethan Hawke y Julie Delpy vuelven a parlotear mientras
pasean al viejo estilo. Esta vez el paso del tiempo y las consecuencias de este
se vuelven en protagonistas convirtiendo lo que antes era etéreo en real. Poco
a poco la erosión del amor surge justo cuando la película utiliza la referencia
rosselliniania de Te querré siempre de forma más o menos sútil. En su tercio
final Antes del anochecer cobra su sentido total. Ya no existen los parajes
románticos de Viena, Paris o Grecia y la pareja se encierra en una fria de
habitación de hotel para afrontar de forma descarnada los problemas reales de
una pareja. Los problemas que no pueden arreglar ninguna conversación abstracta
sobre el sentimiento romántico. Pero por suerte Linklater, Hawke y Delpy no se
han vuelto unos cínicos convirtiendo a nuestros héroes en unos sosias de Los Roper. En el largo y brillante segmento de la discusión los elementos externos
a lo que es el amor como son los hijos, las
relaciones pasadas, los errores...se convierten en losas que acaban pesando
demasiado. Antes del anochecer no habla sobre el fin del amor sino sobre la
supervivencia del mismo y los sacrificios que hay que hacer para no perderlo.
La última escena de la película no es tan emocionante como en Antes de
amanecer o tan brillante como en Antes del atardecer y aun así acaba dejando un
cuerpo extraño. Con el paso del tiempo el amor no desaparece pero sí se
transforma y saber vivir con eso es un reto complejo que Richard Linklater nos
muestra con pasmosa naturalidad. Si Jesse y Celine han podido superar esa
transformación será cuestión de otra película que espero que se produzca dentro
de varios años.
Lo mejor: la inclusión del factor de los hijos dentro de la pareja
Lo peor: esperar a envejecer junto a la pareja para ver su evolución
OPINIONES
Protagonistas de una saga cuyo tono se ha ensombrecido a cada nueva entrega, Jesse y Céline están bien dibujados en las tres partes, y sus conflictos no pueden estar mejor expuestos: Linklater –que en este último episodio firma, como en “Antes Del Atardecer”, el guión con Delpy y Hawke– corrobora su condición de lúcido dialoguista en un contundente duelo verbal ambientado en un paraíso del Peloponeso
• La guinda de la trilogía (Oti Rodríguez Marchante | Hoy Cinema)
La película es redonda, probablemente la mejor de la trilogía, y desemboca en un tercio final sublime, en un alarde de reflexión, de comprensión y de tensión entre ellos, en una especie de examen final de ese máster de pareja en el que la nocturnidad y la alevosía tiñen la película de grandeza y catarsis
• El punto y final a uno de los grandes romances de la historia del cine (Nando Salvá | Cinemanía)
Antes del anochecer entiende como ninguna otra película por qué resulta tan difícil mantener una relación funcionando y que, por tanto, incluso la más emocionante historia de amor puede agotarse
Duele y emociona "Antes del anochecer" por la química y espontaneidad de la pareja y la verdad que desprenden. Maravillosa.
— Nacho Gonzalo (@LoQueYoTeDiga) June 28, 2013
Preciosa y amarga ANTES DEL ANOCHECER. Entre un Bergman sin misantropía y un Rohmer con sentido del humor.
— Alejandro G.Calvo (@AlejandroGCalvo) May 31, 2013
Magistral #BeforeMidnight, que abraza a Rohmer para dialogar con Rossellini y luego bambolear como el Bergman más pirotécnico. #modernidad
— Manu Yáñez (@manuyanezm) June 28, 2013

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Before midnight
Before midnight
2013 Estados Unidos 108 min.
Director : Richard Linklater
Guión: Richard Linklater, Julie Delpy y Ethan Hawke
Intérpretes: Julie Delpy, Ethan Hawke, Seamus Davey-Fitzpatrick, Jennifer Prior, Charlotte Prior, Xenia Kalogeropoulou
http://www.sonyclassics.com/beforemidnight/
Cines: (Alicante) Navas, Yelmo Cines 3D Puerta de Alicante
Guión: Richard Linklater, Julie Delpy y Ethan Hawke
Intérpretes: Julie Delpy, Ethan Hawke, Seamus Davey-Fitzpatrick, Jennifer Prior, Charlotte Prior, Xenia Kalogeropoulou
http://www.sonyclassics.com/beforemidnight/
Cines: (Alicante) Navas, Yelmo Cines 3D Puerta de Alicante
1 comentario:
Película empalagosa donde las haya
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